Por primera vez, un integrante de la familia del cantante hizo declaraciones públicas con respecto a las hipótesis de la repentina muerte del Rey del Pop ocurrida el 25 de junio pasado
Después de quince días de investigación, los agentes forenses manejan dos hipótesis para explicar el repentino fallecimiento de Michael Jackson el pasado 25 de junio: asesinato o sobredosis. Por su parte, el padre del Rey del Pop asegura que cree en que fue un asesinato.
La familia del artista asume que las pesquisas de los detectives podrían derivar en la apertura de un proceso criminal.
"No puedo creer lo que le ha pasado a Michael. Creo que hubo un delito, lo creo, sí", dijo hoy el padre, Joseph Jackson, en declaraciones a la cadena ABC.
Según trascendió a la prensa, la Policía de Los Angeles envió citaciones a los doctores que trataron a Jackson durante su vida para reconstruir su historial médico, determinante para conocer el estado de la salud del artista.
Tras la muerte de Jackson, los agentes incautaron numerosos fármacos en el domicilio del cantante en Los Angeles, algunos serían fuertes calmantes. En estas dos semanas, se conoció que Jackson utilizaba pseudónimos para solicitar recetas para conseguir potentes medicamentos.
Se espera que los resultados toxicológicos de la autopsia solicitada por las autoridades se conozcan en las próximas dos o tres semanas, si bien los forenses contratados por la familia para un segundo análisis podrían ver la luz en menos tiempo.